El Mercado Central de Valencia, también conocido como «La Catedral de los Sentidos», es uno de los mercados más grandes y antiguos de Europa. Con su arquitectura modernista y su gran variedad de productos frescos, el Mercado Central es uno de los lugares más emblemáticos de Valencia.
Sin embargo, detrás de su belleza y su bullicio se esconden numerosas leyendas y relatos que han sido transmitidos de generación en generación. Desde historias de fantasmas hasta leyendas urbanas, el Mercado Central de Valencia tiene una serie de relatos que han cautivado a locales y visitantes por igual. A continuación, te presentamos algunas de las leyendas más conocidas del Mercado Central de Valencia.
- La leyenda del fantasma del pescadero:
Una de las leyendas más populares del Mercado Central cuenta la historia de un pescadero que murió trágicamente en un accidente en el mercado. Según la leyenda, su espíritu sigue vagando por los pasillos del mercado, a veces haciendo ruidos extraños o moviendo objetos. Los vendedores del mercado dicen que el fantasma del pescadero sólo aparece en las noches de luna llena, cuando el mercado está cerrado y vacío.
- El tesoro escondido del Mercado Central:
Otra leyenda popular cuenta que en el Mercado Central se esconde un tesoro que data de la época de los romanos. Según la historia, un grupo de romanos que huían de un ejército enemigo escondió una gran cantidad de oro y plata en algún lugar del mercado antes de ser capturados. Aunque se han hecho numerosas búsquedas, el tesoro nunca ha sido encontrado.
Una variación de esta leyenda cuenta que es el tesoro de los Borja: se dice que la familia Borja, una de las más poderosas e influyentes de Valencia en la Edad Media, ocultó un gran tesoro en algún lugar del actual Mercado Central antes de ser expulsados de la ciudad. Aunque nadie sabe con certeza qué pasó con el tesoro, algunos dicen que está escondido en una de las bodegas del edificio, y que solo se puede encontrar siguiendo las pistas de un mapa secreto.
- La leyenda de la cotorra del Mercado Central:
Una de las leyendas más conocidas del Mercado Central es la de la cotorra que vive en la torre del mercado. Según la historia, esta cotorra solía pertenecer a un antiguo vendedor del mercado que falleció hace muchos años. Se dice que la cotorra sigue viviendo en la torre del mercado y que a veces se pueden escuchar sus gritos desde el exterior del edificio.
- El robo del jamón de la Virgen:
Otra leyenda cuenta la historia de un ladrón que robó un jamón que se encontraba en un altar dedicado a la Virgen del Mercado. Según la historia, el ladrón se llevó el jamón sin saber que había sido bendecido por la Virgen. Cuando intentó comerlo, el jamón se volvió rancio y el ladrón se sintió tan culpable que decidió devolverlo al altar.
- El fantasma de la mujer embarazada:
Según la leyenda, una mujer embarazada fue asesinada en el Mercado Central en el siglo XIX, y su fantasma sigue vagando por el edificio en busca de justicia. Muchos empleados del mercado dicen haber visto la figura de una mujer con un vestido blanco caminando por los pasillos del edificio, y algunos afirman haber sentido su presencia en momentos de soledad y silencio.
- El pozo de los deseos:
Se dice que bajo el Mercado Central hay un pozo que cumple los deseos de quienes arrojan una moneda en su interior. Según la leyenda, este pozo fue construido por los romanos, y los cristianos lo utilizaron después como lugar de culto y oración. Aunque el pozo nunca ha sido encontrado, muchos visitantes del mercado todavía arrojan monedas a los pozos y fuentes del edificio en busca de buena suerte.
- la leyenda del «Gato Negro».
Según esta historia, en la década de 1940, cuando el mercado ya estaba en pleno funcionamiento, un gato negro comenzó a aparecer misteriosamente por las noches. Se decía que el gato era un espíritu que protegía el mercado de los malos espíritus y las energías negativas. Los trabajadores del mercado, fascinados por la presencia del misterioso felino, comenzaron a dejar comida y agua para él, y pronto se convirtió en una figura popular en el mercado. Aunque nadie sabía de dónde venía o a quién pertenecía, el gato negro siguió apareciendo cada noche, durante muchos años. Con el tiempo, la leyenda del gato negro se extendió fuera del mercado, y muchas personas comenzaron a visitar el mercado por la noche con la esperanza de ver al misterioso animal. La presencia del gato negro se convirtió en un símbolo de buena suerte y protección para el mercado y sus trabajadores. Aunque nunca se descubrió la verdadera identidad del gato negro, la leyenda sigue viva en la ciudad de Valencia y forma parte de la historia del Mercado Central.
Estas son sólo algunas de las leyendas que rodean al Mercado Central de Valencia. Cada una de estas historias ha sido transmitida de generación en generación y forma parte del rico patrimonio cultural de la ciudad. El Mercado Central no sólo es un lugar donde se pueden comprar productos frescos y de alta calidad, sino que también es un lugar lleno de historia, misterio y leyendas.